BAJA AUTOESTIMA

Seguro que alguna vez has oído hablar de la autoestima, pues bien, podemos definirla como la evaluación que hacemos de nosotros mismos y, además es el termómetro que mide cuánto nos queremos. Se trata de una actitud estable, que se observa a través de cómo pensamos, sentimos y actuamos con nosotros mismos. La actitud positiva y de aceptación frente a nosotros mismos, sería lo que llamaríamos autoestima sana. Ésta es la que contribuye a un buen funcionamiento psicológico.
Es muy importante tener un buen nivel de autoestima porque, ¿qué ocurre si este nivel es inferior al esperado? En este caso la baja autoestima se convierte en un factor que en muchos casos desencadena en importantes problemas psicológicos y emocionales como por ejemplo, inseguridad, ansiedad, depresión, problemas de alimentación, alcoholismo, obsesiones, etc. Y, además, es un obstáculo para conseguir la felicidad.

¿CÓMO SABER SI TENGO LA AUTOESTIMA BAJA?

Las siguientes señales te pueden indicar que tienes una baja autoestima:

• Sentimientos negativos de inferioridad, poca valía e inseguridad.
• Sensación de soledad y culpa constante.
• Una alta autocrítica y autodesprecio.
• Menosprecias tus habilidades y cualidades y magnificas tus defectos o solo te fijas en ellos.
• Sensaciones ambivalentes sobre ti mismo.
• Mostrarte muy sumiso delante de otros.
• Postergas metas o no tenerlas por sentirse incapaz de poder conseguirlas.
• Escasa confianza en ti mismo.

¿CÓMO PUEDO EVALUAR MI NIVEL DE AUTOESTIMA?

Una de las maneras que puedes utilizar para saber cuál es tu nivel de autoestima es hacer una lista con tus cualidades y tus defectos. Es importante que te esfuerces hasta conseguir el equilibrio entre los dos listados. Nadie es perfecto, todos tenemos cualidades positivas y cualidades a mejorar. Si al hacer tu listado sólo ves defectos, piensa que algo puede estar fallando en cómo te ves a ti mismo.

CAUSAS DE UNA BAJA AUTOESTIMA

Durante los primeros años de la vida, cuando la personalidad se está formando, algunas experiencias pueden dañar la autoestima. Y la persona, que aún no ha desarrollado las armas para enfrentarse a ellas, es quizás cuando comienza a sentirse poco valiosa. Pero, también de adulta, la persona puede vivir experiencias negativas que afecten a su autoestima.

A continuación, destacamos las causas más significativas que llevan a desarrollar a que tengas una baja autoestima:

• Ser víctimas de abusos (sexuales, físicos y/o emocionales) y la pérdida de control asociada a ellos.
• Haber visto desatendidas tus necesidades básicas en la infancia.
• Fracasar en cumplir con las expectativas de tus padres.
• Sufrir discriminación por discapacidad, apariencia física, estatus social o cualquier otra circunstancia.
• Verte empujado por la presión social para seguir ciertas normas.
• Sufrir acoso escolar (bullying) o laboral (mobbing).
• Padecer enfermedades que condicionen tus actividades cotidianas o impacten en tu calidad de vida.
• Sufrir por la pérdida de personas importantes en tu vida.

CONSECUENCIAS DE UNA BAJA AUTOESTIMA

Algunas de las consecuencias más llamativas de la baja autoestima son las siguientes:

• Relacionarte con personas críticas que refuercen la percepción negativa de ti mismo.
• Expresar la falta de confianza en ti a través de comportamientos negativos.
• Ante las situaciones difíciles o de fracaso tendrás la tendencia a evaluarte como una persona inadecuada, sin valía, sentirte constantemente herida y avergonzada de ti misma.
• Un excesivo miedo a perder más la autoestima por lo que genera expectativas bajas, renuncias a metas deseables para evitar el miedo a fracasar.
• Tendencia a volverte cada vez más sumiso y adaptarte cada vez más a las reglas y deseos de otros, sin tener en cuenta tus preferencias y deseos.
• Es un factor de riesgo para sufrir trastornos emocionales como la depresión, trastornos de ansiedad, etc.

¿PUEDO MEJORAR MI AUTOESTIMA?

La buena noticia es que la autoestima no es fija, la podemos cambiar y transformar. En la vida adulta tú eres el encargado de esa actitud sobre ti mismo que se ve reflejada en los pensamientos, sentimientos y comportamientos hacia ti. Una vez tomes consciencia de ello, es bueno que sepas que esa forma de sentir, actuar y pensar se puede cambiar. A continuación mostramos algunas claves que pueden ayudarte a conseguir este logro:

• No te compares con otras personas porque cada persona es distinta. No te tomes tan a pecho los comentarios negativos de personas que no te conocen, al fin y al cabo, no te conocen y no saben quién eres. Practica la auto-superación. El objetivo es superarme a mi mismo/a cada día, no a los demás.
• No confundas autoestima con ser arrogante o egoísta. Tener autoestima te sitúa en un punto en el que aceptas y comprendes que cada persona es un mundo. Otra cosa muy distinta es pensar que eres superior o inferior a los demás, eso no es autoestima y ni mucho menos, saludable. Tú vales y punto. Y además, la persona que más valía tiene en el mundo para ti, eres tú mismo/a. Al fin y al cabo, tú eres la única persona que estás contigo mismo/a las 24 horas del día!!
• Identifica tus miedos, tus errores y haz frente a ellos. Todos comentemos errores, lo importante es ponerle solución y aprender de ellos.
• Aprende a decir NO, a expresar tus opiniones y tus deseos sin miedo, siempre desde un lenguaje claro y sin ofender a la otra persona con la que hablas.

Terapia para recuperar la autoestima

Además de lo que hemos indicado más arriba, en el Centro de Psicología Arganzuela ponemos a disposición de nuestros pacientes una serie de técnicas terapéuticas que ayudarán a la persona a tener una autoestima adecuada. Cuando la falta de autoestima es muy intensa recomendamos la combinación de dos tipos de procesos terapéuticos, uno a nivel individual y otro a nivel grupal.

En las sesiones individuales de psicoterapia se repara la parte personal que está dañada, normalmente, desde la infancia. La persona consigue entender cuál es el motivo por el que tiene tan baja autoestima y consigue reparar este déficit.

En los talleres de grupo la persona consigue aprender técnicas que le ayudan a desarrollar la capacidad para recibir refuerzo positivo y realista. Se trata de conocer y descubrir las virtudes que uno tiene y sacarles el máximo partido. Todos tenemos virtudes y puntos fuertes, lo único es que las personas con baja autoestima no son conscientes de que los tienen. En el trabajo terapéutico de grupo la persona consigue ver sus virtudes y además consigue sentirse cómoda con reconocerlas y con que los demás también se las reconozcan.

Además, también se hace un trabajo de aceptación de los defectos. Conseguir estar en paz con las cosas de uno mismo que no le gustan ayuda enormemente a tener una buena autoestima y por consiguiente a sentirse bien.

Algunas técnicas que también ayudan a subir la autoestima son la reestructuración cognitiva, el entrenamiento en asertividad, el entrenamiento en solución de problemas y la resolución de conflictos interpersonales.

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