Como ya os contamos, el martes 4 de junio se proyectaba el documental VIGOR en el que la directora de nuestro centro había colaborado asesorando acerca de la Vigorexia.

La vigorexia afecta en occidente a más personas que la anorexia o la bulimia, pero se conoce mucho menos. En ocasiones, conseguir un cuerpo perfecto parece que no depende del esfuerzo, dedicación, deporte, una alimentación cuidada y consistente con el ejercicio físico practicado por cada persona. El documental se adentra en el mundo de la obsesión por lograr un cuerpo más fuerte, más grande y más musculoso (no necesariamente más sano), donde el tráfico de sustancias ilegales y su consumo incontrolado son un problema acuciante.
Aquí os dejamos algunas fotos del coloquio que se realizó después de la proyección.
